Pensamiento del lunes 15 de febrero de 2016.
"¿Por qué esta tendencia general a subrayar las faltas de los demás? ¿Por qué ensañarse con hombres y mujeres que se debaten en medio de tantas dificultades? Lo más extraordinario es que, criticándolos mucho creen dar muestras de lucidez, de sabiduría y también de amor. Se dice «quien bien ama bien castiga» y el castigo sigue necesariamente a la crítica: no se puede «castigar» bien a alguien si no vemos en qué ha actuado mal. No, en numerosos casos el amor no consiste en criticar, ni tampoco es sabio hacerlo. Amar a los seres, es comprender sus dificultades y actuar con delicadeza para aliviar sus sufrimientos. Sin embargo la crítica tiene más bien tendencia a burlarse, arañar, herir. A menudo, esto no se trata de amor, sino de encarnizamiento. El verdadero amor no se mancha de sangre, sino que es grande y luminoso. A través de él, os unís a Dios, y Dios os aconseja los mejores métodos para actuar con los seres.
¿Qué es un buen crítico? Un buen jardinero que sabe podar los árboles, enderezarlos, desembarazarlos de las larvas y los insectos dañinos. Preserva lo que es bueno, y pronto aparecen flores y frutos magníficos."
Pensamiento del martes 16 de febrero de 2016.
"Dejamos huellas de lo que somos en todo lo que tocamos. Por otra parte, el hecho de que, según las huellas digitales, se pueda descubrir la identidad de una persona, y también que, en el mundo entero, no se encuentran dos huellas idénticas, demuestra suficientemente que una mano expresa el carácter único de un ser.
Todo lo que pasa por nuestras manos se impregna con nuestros fluidos, con nuestras emanaciones, y trasmite alguna cosa de la quintaesencia de nuestro ser. Por eso, cuando hacéis un regalo a otra persona, con este objeto ya le comunicáis algo de vosotros. Quien lleva una vida desordenada, impregna el objeto que ofrece de ondas negativas. Aunque este objeto sea magnífico y de gran valor, quien lo recibe no obtendrá de él ningún beneficio. Así pues, vosotros sois siempre más importantes que el objeto que ofrecéis, sed conscientes de ello."
Todo lo que pasa por nuestras manos se impregna con nuestros fluidos, con nuestras emanaciones, y trasmite alguna cosa de la quintaesencia de nuestro ser. Por eso, cuando hacéis un regalo a otra persona, con este objeto ya le comunicáis algo de vosotros. Quien lleva una vida desordenada, impregna el objeto que ofrece de ondas negativas. Aunque este objeto sea magnífico y de gran valor, quien lo recibe no obtendrá de él ningún beneficio. Así pues, vosotros sois siempre más importantes que el objeto que ofrecéis, sed conscientes de ello."
Pensamiento del miércoles 17 de febrero de 2016.
"El agua es una materialización del fluido cósmico que llena el espacio. Con el pensamiento podemos entrar en relación con este fluido y purificarnos con su contacto, porque si el agua nos lava en el plano físico, en el plano psíquico posee exactamente las mismas propiedades. La primera condición para este trabajo de purificación, es tomar conciencia de que a través del agua que derramamos sobre nosotros, es posible alcanzar un elemento de naturaleza espiritual…
Cada día, prestad atención cuando os lavéis haciendo gestos moderados, armoniosos, a fin de que vuestro pensamiento pueda desprenderse y concentrarse en el agua, en su frescor y su limpidez. Entonces esta agua alcanzará en vosotros regiones desconocidas para introducir en ellas transformaciones; y no solamente os sentiréis aligerados, purificados, si no que vuestro corazón y vuestro intelecto serán también alimentados con elementos sutiles, vivificantes."
Pensamiento del jueves 18 de febrero de 2016.
"Lo maravilloso es una necesidad del alma humana, y lo que se llama irreal, es una verdad completamente real, más real de lo que se tiene la costumbre de considerar como la realidad. ¡ Cuántas personas, si son sinceras, deben reconocer que los cuentos de hadas les sumergen, por un momento al menos, en una especie de encantamiento! ¿Por qué? Porque en ellos no sólo todo está vivo, sino también animado y dotado de palabra: las rocas, las flores, los árboles, los animales… Y las fuerzas de la naturaleza actúan a menudo no solamente con sabiduría sino también a veces con amor. Pero sobre todo, más allá de su ingenuidad aparente, lo que describen estos cuentos son realidades de nuestra vida interior. Cuando, en ciertas circunstancias muy particulares, lo sutil, lo irreal, lo mágico irrumpen en nuestra vida, nos sentimos como un árbol que, habiendo sido arrancado antaño de su tierra para ser trasplantado en un medio hostil, de repente volviese a encontrarse en su bosque natal donde puede de nuevo enraizar y revivir."
Pensamiento del viernes 19 de febrero de 2016.
"¿Es libre el hombre, o bien está sujeto al destino? Esta cuestión se discute desde hace milenios. El error está en creer que todos los individuos tienen que someterse a las mismas leyes. Aquellos que, como los animales, sólo obedecen a sus impulsos puramente instintivos, están sometidos inevitablemente a las leyes de la fatalidad; es su propia naturaleza la que ha creado para ellos esta fatalidad. Mientras que los que han adquirido el dominio de sus instintos, de sus pasiones, escapan a la fatalidad para entrar bajo la ley de la Providencia, de la gracia, donde conocen la luz y la libertad.
No hay que imaginarse que todo el mundo puede ser libre o que todo el mundo debe sufrir un destino inexorable. No, la libertad depende del grado de evolución. Según su manera de pensar, de sentir y de actuar, el ser humano cae en manos de la fatalidad o atrae las bendiciones de la Providencia. Así pues, en ciertos dominios, está atado, sometido al destino, y en otros puede escapar a él, es libre… hasta el día en que, después de mucho trabajo y de esfuerzo, dispondrá plenamente de su libertad."
Pensamiento del Sábado 20 de febrero de 2016.
"La razón por la que los humanos cometen tantos errores de juicio y de conducta, y conocen tantos sufrimientos, es porque no saben lo que han venido a hacer a esta tierra. Vienen y se van... ¿De dónde vienen? y ¿a dónde van?, lo ignoran. A estas dos preguntas sólo hay una respuesta: Dios.
Hemos salido de la Fuente divina y un día volveremos a ella. A lo largo de nuestras múltiples encarnaciones ¿por qué caminos tendremos que pasar antes de regresar? Esto depende de nosotros. Dios ha previsto, para las criaturas que somos nosotros, un destino excepcional. De vez en cuando, solamente, tenemos una visión fugaz de ello, y debemos aferrarnos a esta visión con todas nuestras fuerzas. Todo lo que puede sucedernos en el camino de vuelta, son etapas. Aunque estas etapas sean difíciles, dolorosas, nunca deben borrar o hacernos olvidar la visión de lo que llegaremos a ser cuando volvamos al seno del Eterno, con todas las experiencias que habremos hecho, con todas las cualidades y virtudes que habremos adquirido y desarrollado."
Pensamiento del domingo 21 de febrero de 2016.
"Los celos son este sentimiento que experimentan los hombres y las mujeres cuando sienten que el ser que quisieran acaparar exclusivamente para ellos se les está escapando. Siempre son causa de grandes sufrimientos y, aún haciendo muchos esfuerzos, es muy difícil vencerlos. El único método eficaz es el de aprender a transponer nuestro amor a las regiones superiores. ¿Acaso una mujer que ama a un hombre por su elevación de espíritu, por sus cualidades de corazón, por su ciencia, no desea que sea reconocido por el mayor número de personas, y que estas personas le aprecien y quieran conocerle? Si su amor se dirige a las cualidades intelectuales, morales, espirituales de este hombre, no se aferra a él, a su presencia física. Porque lo que ama en él es algo sutil, impalpable: nada ni nadie puede quitárselo. Y lo mismo ocurre con un hombre con respecto a una mujer.
¿Queréis escapar a las garras de los celos? Educad vuestro amor, elevadlo a un plano superior. Los celos están indisociablemente ligados al amor sensual. Mientras estéis atados a un ser físicamente, querréis que éste os pertenezca sólo a vosotros. Amadlo espiritualmente, y desearéis presentarlo ante los demás para que también puedan apreciar sus cualidades y beneficiarse de ellas."
Omraam Mikhaël Aïvanhov