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domingo, 13 de marzo de 2016

EL ESPÍRITU DE DIOS NO TIENE QUE VENIR,



EL ESPÍRITU DE DIOS NO TIENE QUE VENIR, EL ESPÍRITU DE DIOS YA ES DENTRO DE TI. PORQUE TÚ ERES LA MANIFESTACIÓN VISIBLE DE ESE ESPÍRITU EN LA MATERIA Y EN UN CUERPO FÍSICO.
Por eso no tienes que acudir a ninguna parte para obtenerlo, ni nadie te lo puede dar, todo lo que se haga en ese sentido es para alimentar al ego intelectual que necesita pruebas desde lo exterior para sentirse seguro.
Nadie por eso puede administrarte lo que ya tienes y eres por eternidades, porque esa esencia infinita de tu Totalidad es autónoma y auto-sostenible, su energía es inacabable, o sea, que no se agota.
Eso que llevas en ti ha estado olvidado por mucho tiempo, es Dios dentro de ti o como quieras llamarlo, pero siempre será energía de luz y de amor. Ese es el gran hallazgo y lo deberías encontrar, escucha sus señales, percibe su sabiduría y humildad, ya que está esperando a que despiertes, porque siempre te ha amado.
Si quieres ver, tocar y amar a Dios, ámate, ámalo y percíbelo en los demás, también en los hermanos menores los animales, en cada planta, en cada roca, también en cada experiencia que tengas, no la juzgues ni como buena ni como mala, eres una "parte" de la divinidad experimentando y creando en tu carne donde se concentra la Totalidad.
Para ello debes contar con los errores, con las "meteduras de pata", pues forman parte del diseño de amor. No se puede quitar nada de tu historia, ni de tu pasado, sombras y luces son parte indispensables de un diseño que has acordado.
Y no confundamos este Espíritu soberano con alguna entidad exterior que se le haya manifestado a alguien en concreto, no es de fiar, además no hace falta, la llevas dentro. Porque este Espíritu no tiene forma ya que es pura energía y nadie le ha visto nunca con los ojos físicos.
Pero si aún así quieres verlo y tocarlo, compruébalo contigo mism@, siéntelo en tu cuerpo, en sus vibraciones y en sus mensajes, escucha tu corazón.
Roly Polanco

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