Páginas

Páginas

lunes, 15 de febrero de 2016

LIBRO El MECANISMO DE DEJAR IR (Dr. David R Hawkins.)



Capitulo II ( Tercer Escrito)
Los Acontecimientos Vitales y las Emociones
La mente racional prefiere mantener las verdaderas causas de la emoción fuera de la consciencia y utiliza el mecanismo de la proyección para hacer esto.
Culpa a los acontecimientos o a las otras personas por "causar" un sentimiento y se ve a sí misma como la víctima inocente e indefensa de las causas externas. "Ellos me hicieron enfadar."
"El me ha trastornado." "Eso me asustó". "Los acontecimientos del mundo son la causa de mi ansiedad". En realidad, es exactamente lo contrario.
Los sentimientos suprimidos y reprimidos buscan una salida y utilizan los acontecimientos como desencadenantes y excusas para desahogarse.
Somos como ollas a presión listas para liberar el vapor cuando la oportunidad se presenta.
Los factores desencadenantes son configurados y preparados para que salgan.
En psiquiatría, este mecanismo se denomina desplazamiento.
Es debido a que estamos enfadados que los acontecimientos nos "hacen" enfadar.
Si, a través de la constante entrega, nos hemos apartado del almacén reprimido de la ira, es muy difícil, y de hecho, incluso imposible para cualquier persona o cualquier situación "hacernos" enfadar.
Lo mismo, por tanto, se aplica a todos los demás sentimientos negativos una vez que hayan sido entregados.
Debido a los condicionamientos sociales de nuestra sociedad, la gente incluso suprime y reprime sus sentimientos positivos. Suprimir el amor deriva en un corazón roto por ataque al corazón. El amor suprimido vuelve a emerger en una excesiva adoración por los animales y diversas formas de idolatría.
El verdadero amor está libre de miedos y se caracteriza por el no- apego. El miedo a la pérdida se potencia por el indebido apego y la posesión. Por ejemplo, el hombre que está inseguro en relación a su novia y es muy celoso. Cuando la presión de los sentimientos suprimidos y reprimidos excede el nivel de tolerancia del individuo, la mente creará un acontecimiento "ahí fuera" en el que se de rienda suelta y se desplace.
Así, la persona con una gran cantidad de dolor reprimido creará inconscientemente acontecimientos tristes en su vida.
La persona miedosa precipita las experiencias aterradoras; la persona enfadada se rodea de circunstancias indignantes; y la persona orgullosa está constantemente siendo insultada.
Como dijo Jesucristo: "¿Por qué ves la paja que está en el ojo de tu hermano, y no sientes la viga que está en tu propio ojo (Mateo 7:3)? "Todos los Grandes Maestros nos señalan el interior.
Todo en el universo emite una vibración.
Cuanto mayor sea la vibración, más poder tiene.
Las emociones, también, debido a que son energía, emiten vibraciones. Estas vibraciones emocionales impactan los campos de energía del cuerpo y revelan efectos que se pueden ver, sentir y medir.
Las imágenes en movimiento mediante la fotografía Kirlian, como las tomadas por el Dr.Thelma Moss, muestran fluctuaciones rápidas del color y el tamaño del campo de energía a los cambios emocionales (Krippner, 1974).
El campo de energía al que tradicionalmente se le ha llamado "aura", puede ser visto por personas que han nacido con o han aprendido la habilidad para ver las vibraciones de esa frecuencia. El aura cambia de color y de tamaño con las emociones.
La prueba muscular también demuestra los cambios de energía que acompañan a las emociones, y como los músculos de nuestro cuerpo responden instantáneamente a los estímulos positivos y negativos. Por lo tanto, nuestros estados emocionales básicos se transmiten al universo. La mente no tiene dimensiones o tamaño, y no está limitada por el espacio; por lo tanto, la mente transmite su estado básico a través de la energía vibratoria a una distancia ilimitada.
Esto significa que de manera rutinaria y sin quererlo afectamos a los demás por nuestro estado emocional y pensamientos.
Los patrones emocionales y sus formas de pensamiento asociadas, por ejemplo, pueden ser seleccionados y recibidos conscientemente por los psíquicos a una gran distancia.
Esto puede ser demostrado experimentalmente, y la base científica para esto ha sido un tema de gran interés en la física cuántica avanzada.
Debido a que las emociones emiten un campo de energía vibratoria, afectan y determinan las personas que están en nuestras vidas.
Los acontecimientos vitales quedan influenciados por nuestras emociones reprimidas y suprimidas en el nivel psíquico.
Así, enfadarse atrae pensamientos de enfado. La regla básica del universo psíquico es que "lo semejante atrae a lo semejante".
Del mismo modo, "el amor promueve el amor", de modo que la persona que ha dejado una gran cantidad de negatividad interior está rodeada de pensamientos de amor, episodios de amor, gente cariñosa, y mascotas cariñosas.
Este fenómeno explica muchas citas de las escrituras y refranes comunes que han desconcertado al intelecto, tales como:
"Los ricos se hacen más ricos y los pobres más pobres" y "los que tienen, consiguen."
Como regla general, por tanto, las personas que acarrean con una conciencia apática atraen circunstancias de pobreza a sus vidas, y los que tienen una conciencia de prosperidad atraen la abundancia a su vida. Debido a que todos los seres vivos están conectados en los niveles de la energía vibratoria, nuestro estado emocional básico es seleccionado y reaccionado por todas las formas de vida que nos rodean.
Es bien sabido que los animales pueden ver instantáneamente el estado emocional básico de una persona. Hay experimentos que demuestran que incluso el crecimiento de las bacterias es afectado por las emociones humanas, y que las plantas registran reacciones medibles a nuestro estado emocional (Backster, 2003)
El Mecanismo del Dejar Ir.
El dejar ir implica ser consciente de un sentimiento, dejarlo crecer, estar con el, y dejar que siga su curso sin querer que sea diferente o hacer nada en relación a el.
Significa simplemente dejar que el sentimiento esté ahí y centrarse en dejar escapar la energía tras él.
El primer paso es permitirte a ti mismo tener la sensación sin resistirla, airearla, temerla, condenarla, o moralizar sobre ella. Significa abandonar el juicio y ver que es solo una sensación.
La técnica consiste en estar con una sensación y entregar todos los esfuerzos por modificarla de alguna manera.
Dejamos de querer resistir la sensación.
Es la resistencia la que mantiene activa la sensación.
Cuando renuncias a resistir o tratar de modificar la sensación, cambiará a un nuevo sentimiento que será acompañado de una sensación más ligera.
Una sensación que no es resistida desaparecerá a medida que la energía tras ella se disipe.
Al comenzar el proceso, te darás cuenta de que tienes miedo y culpa por tener sentimientos; habrán resistencias a los sentimientos en general.
Es más fácil permitir que afloren los sentimientos si dejamos antes la reacción a tener esos sentimientos.
El miedo al propio miedo es un buen ejemplo de esto.
Deja el miedo o la culpa que tienes por la primera sensación, y luego consigue entrar en el sentimiento en si.
Cuando dejes ir, ignora todo pensamiento.
Céntrate en la propia sensación, no en los pensamientos.
Los pensamientos son interminables, se auto- refuerzan, y sólo engendran más pensamientos. Los pensamientos no son más que racionalizaciones de la mente para tratar de explicar la presencia de la sensación.
La verdadera razón de la sensación es la presión acumulada tras los sentimientos que la está forzando a salir en ese momento.
Los pensamientos o acontecimientos externos son sólo una excusa compuesta por la mente.
A medida que nos familiaricemos más con el dejar ir, nos daremos cuenta de que todos los sentimientos negativos están asociados a nuestro miedo básico relacionado con la supervivencia y que todos los sentimientos no son más que programas de supervivencia que la mente cree necesarios.
La técnica del dejar ir deshace los programas progresivamente.
A través de ese proceso, el motivo subyacente tras los sentimientos se vuelve más y más evidente. Estar entregado significa no tener emociones fuertes sobre una cosa: "Está bien si pasa, y está bien si no pasa." Cuando somos libres, dejamos los apegos.
Podemos disfrutar de una cosa, pero no la necesitamos para nuestra felicidad.
Hay una progresiva disminución de la dependencia de todo y todos fuera de nosotros mismos.
Estos principios son conformes a las enseñanzas básicas de Buda de evitar el apego a los fenómenos mundanos, así como también a la enseñanza básica de Jesucristo de "estar en el mundo pero no ser de él". A veces entregamos un sentimiento y nos damos cuenta de que retorna o continúa.
Esto se debe a que todavía hay más de el a entregar.
Hemos rellenado con todos esos sentimientos nuestras vidas y puede haber una gran cantidad de energía presionando que necesite salir y ser reconocida.
Cuando se produce la entrega, hay una ligereza inmediata, y mayor sensación de felicidad, casi como un "subidón".
Al dejar ir continuamente, es posible permanecer en ese estado de libertad. Los sentimientos van y vienen, y con el tiempo te das cuenta de que tu no eres tus sentimientos, sino que el verdadero "tú" se limita a presenciarlos.
Dejas de identificarte con ellos.
El "tú" que es consciente de lo que está pasando siempre sigue siendo el mismo.
A medida que te vuelves más y más consciente de la inmutable presencia interior, empiezas a identificarte con ese nivel de la conciencia. Te conviertes progresivamente ante todo en el testigo y no en el experimentador del fenómeno.
Consigues aproximarte más y más al Ser real y empiezas a ver que habías sido engañado por los sentimientos todo el tiempo. Pensaste que eras víctima de tus sentimientos. Ahora ves que no son la verdad sobre ti mismo; sino que son simplemente creados por el ego, ese colector de programas que la mente ha creído erróneamente que son necesarios para la supervivencia.
Los resultados del dejar ir son aparentemente rápidos y sutiles, pero los efectos son muy poderosos.
Muchas veces dejamos algo pero creeremos que no es así.
Serán nuestros amigos quienes nos hagan conscientes del cambio. Una de las razones para este fenómeno es que, cuando algo es totalmente entregado, desaparece de la conciencia.
Ahora, debido a que nunca pensamos en ello, no nos damos cuenta de que se ha ido.
Este es un fenómeno común entre las personas que están creciendo en conciencia. No somos conscientes de todo el carbón que hemos paleado; siempre estamos viendo la palada que estamos manejando en estos momentos.
No nos damos cuenta de lo mucho que el montón se ha reducido. Muchas veces nuestros amigos y familiares son los primeros en darse cuenta. Para realizar un seguimiento de los avances, muchas personas mantienen un gráfico de sus ganancias.
Esto ayuda a vencer la resistencia que por lo general toma la forma de: "Esto no está funcionando".
Es común que personas que han hecho enormes ganancias digan, "Simplemente no está funcionando". Tenemos que recordarnos a nosotros mismos a veces como éramos antes de empezar este proceso.
Las Resistencias al Dejar Ir.
Dejar ir los sentimientos negativos es disolver el ego, el cual resistirá cada paso. Esto puede derivar en escepticismo acerca de la técnica, "olvidando" entregar, el súbito escapismo repentino, o aireando los sentimientos por expresar y representar.
La solución es simplemente mantenerse en el dejar ir de los sentimientos que tienes sobre todo el proceso.
Deja que la resistencia esté ahí, pero no resistas la resistencia.
Eres libre. No tienes que dejarla. Nadie te está forzando. Mira el miedo tras la resistencia. ¿A qué tienes miedo con respecto a este proceso? ¿Estás dispuesto a dejarlo? Mantente en el dejar ir de todos los miedos a medida que surjan, y la resistencia se resolverá. No hay que olvidar que estamos abandonando todos los programas que nos han convertido en un esclavo y una víctima durante mucho tiempo.
Estos programas nos han cegado a la verdad de nuestra verdadera identidad.
El ego está perdiendo terreno e intentará trucos y trampas.
Una vez que empecemos a dejar ir, sus días están contados y su poder disminuirá.
Uno de sus trucos es mantenerse inconsciente sobre la técnica en sí, por ejemplo, decidir de repente que el mecanismo de la entrega no está funcionando, que las cosas siguen igual, que es confuso, y también que es muy difícil de recordar y hacer. ¡Esto es un signo de progreso real!
Esto significa que el ego sabe que tenemos un cuchillo con el que trocearnos libremente y está perdiendo terreno".
El ego no es nuestro amigo. Al igual que el "Control Central" en Tron (1982), quiere mantenernos esclavizados por sus programas. El dejar ir es una habilidad natural. No es algo nuevo o extraño.
No es una enseñanza esotérica ni la idea de otra persona o un sistema de creencias. Sólo estamos utilizando nuestra propia naturaleza interior para conseguir ser mas libres y felices.
Cuando dejas ir, no es útil "pensar" sobre la técnica.
Es mejor, simplemente, tan sólo hacerlo.
Con el tiempo se verá que todos los pensamientos son resistencia. Son todas imágenes que la mente ha hecho para impedirnos experimentar lo que realmente es.
Cuando hayamos estado dejando ir un tiempo y hayamos comenzado a experimentar lo que realmente está pasando, nos reiremos de nuestros pensamientos.
Los pensamientos son falsos, absurdas creencias construidas que oscurecen la verdad.
Perseguir los pensamientos pueden mantenernos ocupados interminablemente.
Descubriremos un día que tenemos razón cuando empecemos.
Los pensamientos son como peces de colores en un bol; el Ser real es como el agua. El Ser real es el espacio entre los pensamientos, o más exactamente, el campo de la consciencia silente debajo de todos los pensamientos.
Hemos tenido la experiencia de estar totalmente absortos en lo que estábamos haciendo, cuando apenas nos dimos cuenta del paso del tiempo.
La mente estaba muy tranquila, y simplemente estábamos haciendo lo que estábamos haciendo sin resistencia o esfuerzo. Nos sentimos felices, tal vez tarareando algo.
Haciendo las cosas sin estrés.
Estábamos muy relajados, aunque estuviéramos ocupados.
De repente nos dimos cuenta de que nunca necesitamos todos esos pensamientos después de todo.
Los pensamientos son como la carnada para un pez; y si picamos, nos atrapan. Es mejor no picar en los pensamientos.
No los necesitamos. En nosotros, pero al margen de nuestra consciencia, está la verdad de que “Ya se todo lo que necesito saber”. Esto sucede automáticamente.
Paradójicamente, la resistencia a la entrega se debe a la eficacia de la técnica. Lo que sucede es que nos mantenemos en el dejar ir aun cuando la vida no vaya demasiado bien y estemos acosados por emociones desagradables.
Cuando finalmente entregamos nuestra manera de salir de ellas y todo va bien, entonces abandonamos el dejar ir.
Esto es un error porque, por muy bien que nos podamos sentir, por lo general hay más por hacer. Aprovecha los estados elevados y el impulso de dejar ir. Sigue adelante porque será mejor y mejor a cada momento. El dejar ir gana cierto impulso.
Es fácil mantenerlo una vez se ha empezado.
Cuanto mejor nos sintamos, más fácil es dejar.
Ese es un buen momento para descender y dejar algunas cosas (la "basura" suprimida y reprimida) que no habríamos querido abordar si estuviéramos en el vertedero.
Siempre hay una sensación de estar menguando y entregado. Cuando nos sentimos bien, las emociones son simplemente sutiles.
A veces te sentirás atrapado por un sentimiento en particular. Basta con entregar la sensación de estar atrapado.
Solo déjalo estar ahí y no lo resistas.
Si no desaparece, ve si puedes dejar el sentimiento punto por punto y por partes. Otro bloqueo que puede ocurrir es el miedo de que si dejamos el deseo por algo, no lo conseguiremos.
A menudo es beneficioso examinar algunas creencias comunes y dejar de creer que son ciertas desde el principio, como:
(1) Sólo nos merecemos las cosas por el trabajo duro, la lucha, el sacrificio y el esfuerzo.
(2) Sufrir es beneficioso y bueno para nosotros.
(3) No conseguimos nada a cambio de nada;.
(4) Las cosas sencillas no valen mucho. Dejar ir algunas de estas barreras psicológicas hacia la propia técnica, permitirá el disfrutar de su esfuerzo y facilidad.
Dr. David R Hawkins.

No hay comentarios:

Publicar un comentario