"LA ETERNA LUCHA DEL HOMBRE CARNAL Y EL HOMBRE ESPIRITUAL"

¿Sabes la historia de los dos Lobos que llevamos dentro, cual triunfa?
"Una mañana un viejo Cherokee le contó a su nieto acerca de una batalla que ocurre en el interior de las personas y le dijo:
"Hijo mío, la batalla es entre dos lobos dentro de todos nosotros: 
"Uno es Malvado - Es ira, envidia, celos, tristeza, pesar, avaricia, arrogancia, auto compasión, culpa, resentimiento, inferioridad, mentiras, falso orgullo, superioridad y ego..” 
"El otro es Bueno - Es alegría, paz amor, esperanza, serenidad, humildad, bondad, benevolencia, empatía, generosidad, verdad, compasión y fe." 
El nieto lo meditó por un minuto y luego preguntó a su abuelo: 
“¿Qué lobo gana?” 
El viejo Cherokee respondió, 
"Aquél al que tú alimentes"."
Pablo lo expreso de esta manera:
!Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?
Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado". Romanos 7:24-25
Acabamos de ver dos formas diferentes de expresar lo mismo: la eterna lucha que se desarrolla dentro de todo aquel que "despierta". Consideras tu haber "despertado" de la ignorancia de tanto tiempo y estar en medio de esta batalla?
Todos nosotros tenemos un aspecto "carnal" y un aspecto "espiritual". Hay en todos nosotros como dos realidades, dos fuerzas. La gran "verdad" es que es nuestro aspecto y mente carnal la que hasta ahora a dominado la existencia: domina nuestros pensamientos, domina nuestros sentimientos, nuestras reacciones, nuestros anhelos, frustraciones, miedos, inseguridades, soledades, pánicos, hambre, deseos. Esa "mente" esa energía, ese bagaje no puede viajar con el Alma y nuestra alma no puede viajar con ese equipaje de energías densas: Demasiado peso.
Qué hacer? Alimentar la "mente espiritual: dejar que el Alma se exprese en nosotros. Aceptar voluntariamente que debemos menguar poco a poco, y dejar que cada día nuestra alma vaya tomando control de nuestra existencia. Meditar...y dejar ir las energías groseras que nos dominan. Poco a poco ir conociéndonos como somos en verdad: lo que pensamos, lo que deseamos, cuáles son nuestras metas y prioridades en la vida: analizar nuestros pensamientos constantemente.
La tarea amigo estudiante no es fácil: prepárate para recibir golpes, insultos, caídas: pero si perseveras el triunfo será tuyo.
Que el Señor te Bendiga hoy, mañana y SIEMPRE!