El amor de verdad es algo no personal, pues se ama cuando el yo programado no existe ya. Esforzarme por ver cómo eres tú, y comprenderte y aceptarte tal cual eres: eso es el amor. Esto no excluye que tengas preferencias. Yo prefiero la relación con personas determinadas porque esa relación es más gozosa, pero esa preferencia ha de dejarme libre para gozar con la amistad de los demás, para escuchar los demás instrumentos.
Cuando amas de verdad a una persona, ese amor despierta el amor a tu alrededor. Te sensibilizas para amar y comienzas a descubrir belleza y amor a tu alrededor.
El enamoramiento, en cambio, es de lo más egoísta. El amor de verdad es un estado de sensibilidad que te capacita para abrirte a todas las personas y a la vida. Y, cuando amas, no hay nada más fácil que perdonar.
Aceptar a las personas que todo el mundo rechaza, y no porque no veas sus fallos, sino precisamente porque los ves como realmente son, de dónde proceden y cómo se parecen a los tuyos, que ya tienes aceptados.
Aceptas también no tener razón, escuchando las razones de los demás con interés. Y, sobre todo, sabes responder al odio con amor, no porque te esfuerzes en ello, sino como milagro de la comprensión del amor verdadero, que ve a la persona tal cual es.
Las tres señales de estar despierto son: perdonar, aceptar y responder ante todo con amor.
Anthony de Mello
soyluzenelcamino.blogspot.com.es
soyluzenelcamino.blogspot.com.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario